25/07/2023 - El director griego nos habla del origen de su último proyecto, de cómo es trabajar con Willem Dafoe y de su opinión sobre el arte como necesidad humana básica

(© Damir Vujković)

Tras su estreno mundial en la sección Panorama de la Berlinale, el director griego Vasilis Katsoupis ha presentado su primer largometraje de ficción, Inside [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Vasilis Katsoupis
ficha de la película], en la competición del 30.º Festival de Cine Europeo de Palić, donde recibió una mención especial del jurado oficial (ver la noticia). Nos hemos sentado con el director para hablar de su último trabajo, que gira alrededor de un ladrón de arte interpretado por Willem Dafoe, que entra en un lujoso apartamento de Nueva York y queda atrapado en su interior.

Cineuropa: ¿De dónde surge la idea original de la película?
Vasilis Katsoupis: Mientras observaba los rascacielos de Nueva York, empecé a pensar en historias de supervivencia como Robinson Crusoe y Náufrago, pero en un escenario diferente: en medio de una megalópolis abarrotada, en lugar de en una isla solitaria. Creo que este contexto intensifica la sensación de soledad, porque puedes ver a todo el mundo a tu alrededor seguir con sus vidas mientras tú estás atrapado. Esa era la idea inicial. El antagonista es el propio apartamento, que al mismo tiempo representa a su propietario, personificado en su colección de arte. Así es como las obras de arte se convirtieron en uno de los elementos más importantes de la película a nivel narrativo.

Has dicho en varias entrevistas que Willem Dafoe siempre fue tu primera opción para interpretar al personaje principal. ¿Qué significó para ti que se sumase al proyecto y cómo lograste convencerlo?
Sé que es raro decir que era mi primera opción porque suena arrogante. ¿Quién soy yo para tener a Willem Dafoe como primera opción? Fue un sueño hecho realidad conseguir a uno de los actores que he admirado desde mi infancia. Nunca habría imaginado que realmente haría una película con él. Sin embargo, a veces los sueños se hacen realidad. Creo que le atrajo la idea y el guion que [el guionista] Ben Hopkins y yo le presentamos.

Imagino que tuvo una gran influencia en el desarrollo del personaje. ¿Cómo trabajaste con él en el papel?
Le confié totalmente a este personaje. Le dije que la película solo podía funcionar si el personaje, y las cosas que hacía, resonaban con él y con la forma en que reaccionaría en esa situación. Trabajamos juntos en los últimos borradores del guion, y seguimos adaptándolo durante el rodaje. Alrededor del 40 % de lo que ves en la película es improvisado. Teníamos un director de fotografía fantástico y muy rápido [Steve Annis], que podía cambiar la iluminación en el momento. Conseguimos ser más flexibles, y esta flexibilidad nos ayudó mucho.

Las películas sobre gente atrapada en sitios se han convertido casi en un género en sí mismo. ¿Qué te atrae de este tipo de historias?
Las reacciones de los personajes y su ingenio. Creo que es una historia con la que todo el mundo puede identificarse, sobre todo después de la experiencia del confinamiento. Estuvimos encerrados en nuestros pisos y casas, y conseguimos superarlo de maneras muy distintas. Por eso quería hacer una película abierta a la interpretación, en función de las experiencias de cada uno.

¿Te preocupaba evitar posibles agujeros de guion?
Si observas la película de forma lógica, quizá tenga demasiados agujeros argumentales, pero no se trata de eso. Se trata de meterse en este agujero negro, perderse en el tiempo y seguir a este personaje. Si intentas encontrar todas las pistas como un detective, pierdes de vista el objetivo. Hay que ver las películas y las obras de arte con el corazón, no con el cerebro.

¿Consideras el cine y el arte como un lujo o como una necesidad básica?
Después de esta experiencia, estoy completamente seguro de que no es un lujo. En la sociedad moderna, tendemos a mercantilizar el arte. Lo vemos como una inversión. Sin embargo, si pensamos en la cantidad de música, películas y libros que consumimos durante el confinamiento, está claro que era la única forma de sobrevivir. Si te encierro en una habitación vacía durante días, sin ningún estímulo visual, aunque tengas comida y agua, te volverás loco. Eso es el arte, un estímulo visual, y también una herramienta de comunicación. Así es como sabemos cómo era la vida de las civilizaciones antiguas, gracias a las obras de arte que dejaron. Es como una cápsula del tiempo.

Hablando de lujos, tener la posibilidad de rodar cronológicamente sigue siendo una rareza en el cine. ¿Cómo fue el proceso?
Este es uno de esos proyectos que no es posible rodar de otra manera, porque destruimos el decorado día a día. En realidad, era más barato rodar cronológicamente, pero también era muy útil para el actor, porque podía desarrollar su personaje progresivamente. Fue una experiencia maravillosa.

(Traducción del inglés)